Soneto 137. UN VIAJE EN GLOBO
En el caótico cielo es intruso
un globo que vuela sin pasajeros,
que desdibuja rostros de viajeros
y siluetas de nubes en desuso.
En la barquilla - sin rumbo - se puso
un vástago al pie - sin humilladeros -
y una cortina de hilo - de hilanderos -
que descifra amor de amores incluso.
El globo, que avanza en cada momento,
disfruta a su paso de cada evento
y se oculta del aire que se opuso.
El cristal del agua se mueve lento,
descubre que su vuelo es fraudulento
y se burla de nuestro mundo iluso.
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